El fin de semana empezó el sabado "temprano" por la mañana. Salimos de casa con unas tres bolsas gigantes, vacías... Nos encontramos con Daniel y Zé en la parada del 16, al comienzo del mercado de Albert Cuyp Straat. Qué diferencia con lo que había visto en mi primer visita!! Supongo que porque la primera vez había sido un día de semana por la tarde. Pero al explorar más y más el mercado, un sábado por la mañana, me quedé convencidísima de que había encontrado el paraíso terrenal para Mário... Encontré La Boquería en Amsterdam!! BINGO!!
Parecíamos niños en una tienda de dulces, pero en vez de niños éramos cuatro "adultos" de 30 y en vez de dulces había pescado, frutas y verduras!!!
Fifinha abusó de su cartera y de los brazos de los chicos y se fue de compras como si estuviera en la 5ta Avenida, sólo que en vez de carteras y zapatos compró pulpos y merluzas, jejeje, a lo portugués!!
Cuando ya se nos terminó el mercado (y ya no podiamos cargar nada más) volvimos a casa y la mitad fue al freezer y la otra mitad a la cacerola!! Ganda sapateira que nos zampamos!!! Estuvimos unas tres horas dale que te dale partiendo y comiendo, partiendo y comiendo, hasta que en un momento de repente fui consciente de lo que hacían mis manos y tuve que parar porque no podía comer nada más!!
Amor, no envidio tus gafanhotos si tengo sapateira!! :D
Amor, no envidio tus gafanhotos si tengo sapateira!! :D
Luego llegó el momento de ir a buscar mi bicicleta de niña!! No fue tarea fácil ya que estaba del otro lado de Amsterdam y en el barrio más raro que he visto en mi vida. Al final, la dueña de la bicicleta (italo-holandesa) y su hija (italo-holando-somalí) tuvieron que venir a rescatarnos con el coche porque ya no sabíamos cómo llegar. Pero tengo mi bici!! Una hermosa bici rosa y pequeñita!! A la cual puedo subirme sin necesitar una escalera!! Aún no la he estrenado porque tenía los neumáticos desinflados y he estado haciendo la prueba para ver si están pinchados. Parece que no, así que mañana: Agarrate Amsterdam!! Aí vou eu!!!
Y luego llegó papá, jejeje. Después de 12hs de vuelo y 3 de tren, llegó a su Amsterdam vieja y querida!! Así que me fui a visitarlo al hotel. Un hotel muy curioso, con escalera a lo holandés, pero muy simpático, jeje! Así que ahí, entre Heineken y jugo de frambuesa, pusimos un poco al día las noticias de aquí y de acullá e intercambiamos presentes y encargos. Ay, que se echa de menos la familia cuando uno anda de aventura en aventura!!!
Mañana más!!
1 comentario:
Qué sepas qué me vuelvo más loca en una tienda Gourmet (delicatessen) que en una tienda de zapatos. Me encantan los colores de la comida, imaginarme las mil comidas que puedo hacer con lo qué he comprado, me encanta el placer anticipado de probar lo qué elijo. Me encanta mimarme! Me chifla! Por eso contraté los dos chicos! :)))) A que ha merecido la pena?
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